nas con las competencias adecuadas para realizar-la. Por otra parte, la perspectiva cognitiva ha plan-teado que debe ser considerada como un proceso mental del analista.

El ARI por el contenido y alcance de su objeto de estudio, integra varios saberes, conocimientos y ex-periencias que comprenden la historia, la economía, la sociología política, la comunicación política, las perspectivas de defensa y seguridad, así como la psicología política.

El ARI como área del conocimiento debe ser conside-rada una disciplina aplicada que, a través del estudio científico, tiene como propósito fundamental explicar, estimar los posibles comportamientos y proponer so-luciones a múltiples problemáticas y situaciones en la esfera de las relaciones internacionales. Para cumplir con esa finalidad, su objeto de estudio comprende:

La identificación e interrelación de los factores o fuentes que determinan el comportamiento del siste-ma internacional y la política exterior de los estados.

La conformación de la política exterior, sus diferen-tes etapas y las relaciones entre los factores y acto-res que inciden en este proceso.

Los modelos analíticos que explican la formulación y toma de decisiones políticas vinculada a los temas de política exterior.

Los fundamentos conceptuales de los objetivos y tipos de análisis.

El proceso de análisis y sus diferentes etapas.

Los métodos y técnicas que se emplean para la pro-ducción de análisis.

El modelo mental de los analistas, los sesgos cogniti-vos y el pensamiento crítico (psicología del análisis)

Las competencias, formación y desarrollo de los analistas.

Los sistemas de análisis en las organizaciones espe-cializadas.

Finalidades, objetivos y tipos de análisis

Con relación a la finalidad y los objetivos del ARI, surgen dos preguntas claves: ¿para qué existe el Análisis de las Relaciones Internacionales? ¿Qué ob-jetivos específicos nos proponemos cuando realiza-mos esta actividad? La respuesta más recurrente a la primera interrogante está orientada a que la fina-lidad del Análisis de las Relaciones Internacionales es contribuir al proceso de toma de decisiones de los funcionarios públicos, a diferentes niveles, en la esfera de las relaciones internacionales (Tomassinni, 1989). Este planteamiento circunscribe la existencia del ARI a las estructuras gubernamentales.

No obstante, existen organizaciones e institucio-nes que también realizan este tipo de análisis y no tienen necesariamente esa finalidad. Por lo tanto, habría que comenzar por delimitar cuáles son algu-nas de esas instancias. Por ejemplo, los medios de comunicación masiva que tienen áreas o segmen-tos dedicados a temas internacionales; los tanques pensantes; las firmas de consultorías estratégicas; centros de estudios o investigaciones; así como ex-pertos que a título individual emiten sus opiniones.

En todos estos casos, se produce Análisis de las re-laciones internacionales con diferentes finalidades. En el caso de los medios de comunicación, su pro-pósito es influir en la opinión pública. Los tanques pensantes están orientados a incidir con sus análisis en el proceso de conformación de política represen-tando los intereses de los sectores que financian sus investigaciones.

Los centros de estudios como norma se enfocan en aportar nuevos conocimientos desde la cien-cia, aunque también contribuyen en ocasiones al proceso de toma de decisiones. Por su parte, las firmas de consultoría realizan sus análisis con la finalidad de satisfacer las necesidades planteadas por sus clientes.